(CNN)– Francia ha prohibido la venta, instalación y transporte de fuegos artificiales durante el final de la semana del Día de la Bastilla por temor a nuevos disturbios.
Se filmó a manifestantes lanzando escapes artificiales durante una ola de disturbios violentos que se apoderó del país donde un oficial de policía se topó con un adolescente de 17 años hasta fines de junio.
“Para prevenir el riesgo de tumbas desórdenes públicas durante las festividades del 14 de julio, la venta, la puerta, el transporte y el uso de artículos pirotécnicos y fuegos artificiales están prohibidos en toda Francia hasta el 15 de julio inclusive”, según el decreto publicado en el diario oficial del gobierno francés este domingo.
El Día de la Bastilla, que es el día nacional de Francia, se celebra cada año el 14 de julio con espectaculares espectáculos de fuegos orientales organizados por todo el país.
El decreto, que entró en vigor de inmediato, no se aplica a los profesionales o áreas locales que organizan espectáculos de fuegos artificiales para la festividad.
Produce luego de que la primera ministra de Francia, Élisabeth Borne, reitere que el gobierno francés está considerando multar a los padres de los menores involucrados en disturbios.
El presidente francés, Emmanuel Macron, propuso este martes imponer «una especie de precio mínimo desde el primer acto de educación» a los padres de menores, siguiendo a BFMTV, afiliada de CNN.
Borne confirmó al diario francés Le Parisien en una revista publicada este sábado que el gobierno está investigando el medicamento y está en la lista de «evolucionar la ley» si es necesario, según BFMTV.
“Hoy, cuando un adulto comete un acto de esta naturaleza, podemos recurrir a través de una multa fija. Es rápido y eficiente. Esto no es posible para los menores. Por eso, vamos a construir una disposición que lo permita”, dijo Borne.
Menos de entre 12 y 13 años fueron detenidos por la policía durante los recientes disturbios, según el ministro del Interior del país, Gérald Darmanin.
Darmanin dijo a los periódicos la semana pasada que la edad promedio de las 2.000 personas detenidas por la policía francesa era de 17 años.
